HABLEMOS DE PAISAJISMO INTERIOR
Los paisajes interiores aportan una variedad de beneficios para la salud, se ha demostrado que los espacios verdes reducen el estrés, mejoran el estado de ánimo y aumentan la productividad en los ambientes de trabajo. Por ejemplo, en estos lugares la mayoría de los empleados pasa el 90% de su jornada laboral en interiores, y el aire dentro puede estar muy contaminado con moho, productos químicos y dióxido de carbono. El paisajismo interior mejora la calidad del aire al liberar oxígeno y filtrar contaminantes nocivos. De no contar con una buena ventilación natural o con algunas especies de vegetación puede provocar el famoso síndrome del edificio enfermo, donde todos los usuarios empiezan a bajar su rendimiento laboral.
Igualmente, los investigadores están de acuerdo que la variable de densidad y área foliar es determinante en la mitigación de la temperatura.
En escalas más grandes, de acuerdo a estudios realizados sobre las áreas verdes en 2001 para la ciudad de Chicago por ejemplo, se comprobó que estas zonas ayudan a reducir los índices de violencia doméstica, dada la influencia positiva que estas áreas tienen sobre el estado anímico, y se podría seguir mencionando múltiples beneficios que aporta el paisajismo interior en la vida cotidiana hoy día.
Sin embargo la falta de conocimiento o de una correcta asesoría por parte de expertos en planificación y diseño contribuye a la no implementación de la vegetación como herramienta tan provechosa en nuestros espacios; otro factor que por la cual muchas personas no tienen jardines con vegetación es por el mantenimiento, el costo de este y todo lo que implica, desde el control de basura generada por las hojas, hasta el control de plagas y enfermedades propias de la vegetación.
Para valorar la importancia que tiene el paisajismo interior es necesario recalcar en los aportes que este conlleva para nuestra vida y en base de ellos tomar decisiones más acertadas al momento de definir nuestros espacios ya sea en la planificación de nuevos espacios o bien al momento de remodelar los mismos.
Sabemos que plantar vegetación puede ayudar al medio ambiente mediante la reducción de las aguas residuales, la captura de carbono y mitigar los efectos del cambio climático en cuanto a espacios externos o jardines macros nos referimos, sin embargo estas bondades podemos llevarlas a nuestros interiores ya que según nuevos hallazgos se conoce el posible beneficio conjunto que es la mejora de la salud de los individuos y esto está mostrando a planificadores, arquitectos paisajistas e incluso políticos una herramienta para el desarrollo de lugares más saludables.
Hoy día se conoce que la vegetación trabaja como un factor de enfriamiento pasivo ya que tiene la habilidad natural de filtrar los contaminantes en el aire y mitigar la temperatura del aire y del suelo, además de generar beneficios a la salud para la comunidad.
Las plantas en general, incrementan la humedad en el aire, lo cual nos ayuda a que mantengamos nuestras mucosas, garganta y piel bien hidratadas. Asimismo, evita que padezcamos otros males derivados de un ambiente seco tales como la tos o la irritación de la piel. Otro beneficio de las plantas es que reducen el ruido, sobre todo en lugares cerrados aunque esta alteración acústica se percibe más cuando la frecuencia del sonido es muy alta. Se puede decir que ahogan los sonidos.
Tener plantas, igualmente tiene efectos psicológicos y anímicos positivos. El contacto que se mantiene con éstas no determinará dichos efectos, pues serán igual de favorables tanto como si solo se contemplaran, así como si se trabajara con ellas.
Las plantas incrementan el nivel de concentración y comprensión, y atenúan sentimientos negativos como el miedo o el enfado. Además, está comprobado que un enfermo se recupera más rápido y mejor en presencia de flores y plantas. Psicológicamente han resultado ser un estimulante absolutamente sano y natural. De ellas han derivado la cromoterapia y la aromaterapia, técnicas que ratifican que la influencia de los aromas y los colores, además de las funciones físicas y químicas de las plantas, estimulan y crean una sensación de bienestar en las personas.
Al hablar de diseño de interiores pensamos únicamente en el mobiliario, la decoración, colorimetría, etc., pero no siempre consideramos la inclusión de plantas como algo relacionado directamente con el diseño de espacios y deberíamos, pero no todos los arquitectos y planificadores valoramos esta importancia. La relación del pequeño jardín con la decoración de interior es hoy día, extremadamente válida. Debería ser así porque es un acompañamiento al diseño que se proponga para un espacio y es algo que va a resaltar este último positivamente dado además de todos los beneficios para la salud que mencionamos, los beneficios estéticos que esto nos aporta en los ambientes.
Los patios, balcones y terrazas que cuenten con zonas verdes, favorecen y realzan al diseño interior, es por eso que se debe sacar provecho en todo momento de la ubicación de ornamento, colocado estratégicamente para causar sensaciones en el interior de las habitaciones que cuenten con ventanales que den al exterior por ejemplo.
Los patios, ya sean interiores o exteriores, pueden ser considerados el pulmón de la vivienda. El resto de las habitaciones se distribuyen alrededor de este espacio para aprovechar al máximo la ventilación y la luz natural. Las puertas correderas o las ventanas fijas favorecen la continuidad visual con los espacios de jardín, y a la vez se protege el interior. Por ejemplo, si se planifica disponer de varios patios, cada habitación, nivel o zona pudiera contar con su propia salida al exterior.
En conclusión, en el diseño de interiores es importante el implemento de la vegetación, ya sea solo por el punto de vista estético o por alguna estrategia pasiva. De cualquier forma, se reciben un sin número de beneficios, pero desafortunadamente existe mucha desinformación por lo cual es muy importante seguir investigando para que se pueda explotar los beneficios del paisajismo interior en los proyectos de diseño.